64
artículos
Kevin González
Kevin González Hodgson
Mirando a la
Muerte: análisis
iconográfico de la
cerámica Sacasa
Estriado en Villa
Tiscapa, Managua
65
artículos
Mirando a la muerte: Análisis iconográfico Sacasa Estriado
Revista Humanismo y Cambio Social. Número 10. Año 4. Julio-Diciembre 2017 Pág 64-79
Looking at the death: iconographic analysis
of Sacasa Striated ceramics in Villa Tiscapa,
Managua
RESUMEN
Esta publicación se presenta dentro del marco del proyecto de rescate
arqueológico en Villa Tiscapa, departamento de Managua y se centra en
el análisis de estilos y motivos decorativos expresados en la tipología
cerámica Sacasa Estriado (800-1520 d.C.) y su vínculo con prácticas
funerarias prehispánicas en el período de ocupación post-clásico. A los nes
propuestos, por medio de un estudio iconográco, se denen los elementos
característicos de la cerámica mencionada que permiten entender y
determinar una lectura directa de la materialidad funeraria como referente
de lo social. Todo ello está ligado a la producción y reproducción de la
sociedad por cuanto actúa como mecanismo de transmisión particular de
ver al mundo social y de denotar relaciones sociales cotidianas activas del
sujeto precolombino.
ABSTRACT
This publication is presented within the framework of the archaeological
rescue project in Villa Tiscapa, Managua Department, and focuses on the
analysis of styles and decorative motifs presented in Sacasa Striated ceramic
(800-1520 AD) and its link with pre-Hispanic funerary practices in the post-
classic period of occupation. For the proposed intended, by means of an
iconographic study, it is dened the characteristic elements of the mentioned
ceramic that allow to understand and determine a direct reading of funeral
materiality as a benchmark from the social component. This is linked to
the production and reproduction of society, because it acts as a particular
transmission mechanism to see the social world and denote everyday social
relations of the pre-Columbian subject.
PALABRAS CLAVE
Sacasa Estriado, cotidianidad, prácticas
funerarias, estilos y motivos decorativos.
KEY WORDS
Sacasa Striated, daily life, funerary
practices, styles and decorative motifs
Kevin González Hodgson
1
Arqueólogo e investigador
Centro Arqueológico de Documentación e
Investigación
CADI-UNAN-Managua
ORCID. 0000-0003-1127-4309
hodgsonk27@hotmail.com
Mirando a la Muerte:
análisis iconográfico
de la cerámica
Sacasa Estriado
en Villa Tiscapa,
Managua
1 Agradezco a los miembros del equipo de investigación: a la arqueóloga Scarleth Álvarez por su colaboración en la realización de los dibujos, al igual que al personal del CADI y
evaluadores anónimos cuyas observaciones mejoraron la versión final del texto.
Copyright © 2017 UNAN-Managua
Todos los Derechos Reservados.
66
artículos
Kevin González
Introducción
L
a información que aquí se presenta es resultado de la investigación arqueológica que se
realiza en el marco del Proyecto Rescate Arqueológico en Villa Tiscapa, que contó con
el esfuerzo inter-institucional de la Dirección Nacional de Arqueología, (DNA) del Instituto
Nicaragüense de Cultura (INC), del Centro Arqueológico de Documentación e Investigación (CADI),
de la Facultad de Humanidades y Ciencias Jurídicas de la Universidad Nacional Autónoma de
Nicaragua, Managua (UNAN-MANAGUA) y la Dirección de Patrimonio de la Alcaldía de Managua
(DP-ALMA)
2
durante el período del 29 de mayo al 16 de junio de 2017.
Al abordar lo relacionado con la cerámica con motivos zoomorfos, antropomorfos y geométricos,
surgen diversas preguntas -a como sucede con cualquier secuencia de signos o imágenes- a
las que difícilmente se le encuentran respuestas claras y precisas sobre su signicado
3
, debido
al poco interés por reexionar sobre los elementos decorativos en este tipo de cerámica y su
vínculo con prácticas funerarias.
Este estudio considera como hipótesis inicial que la presencia de determinadas características
de la tipología cerámica Sacasa Estriado
4
en la estructura mortuoria en Villa Tiscapa, muestra
más allá del nivel de la organización social, como por ejemplo, el modo de ver el mundo, es decir,
expresiones de ideas e inquietudes que se produjeron permanentemente desde lo cotidiano en
las relaciones sociales, en este caso desde la cosmovisión de los amerindios Chorotegas. Muy
poco se discute sobre la riqueza de datos que se generan a partir de este tipo de manifestaciones
que admite códigos propios de sus creadores
5
.
Desde esa perspectiva, el objetivo principal de este estudio es analizar los motivos y estilos de
la cerámica Sacasa Estriado como expresión de identidad y su correlación con pensamientos,
ideas y nociones practicados en la cotidianidad y cosmovisión chorotegana en Villa Tiscapa.
Para ello, fue necesario realizar un acercamiento a los valores otorgados a este tipo de cerámica
a partir del enfoque iconográco e iconológico como procedimientos para identicar y clasicar
el contenido temático de su cultura simbólica.
Los apartados que siguen pretenden proporcionar elementos de juicio con énfasis en tres
importantes puntos de los cuales se desprende el particular interés de estudio: 1- este trabajo
nace de la observación, es decir, los objetos cerámicos no tienen por qué tener un solo uso,
por el contrario al haber cumplido su función original hasta su fragmentación o desgaste, no
tiene por qué haber nalizado su vida útil; 2- la historia antigua del país no es homogénea y ello
supone que la tipología Sacasa Estriado, al menos en Villa Tiscapa, está asociada con temas
como la fertilidad y la dualidad construidos a partir de la cotidianidad; 3- el estudio no brinda
conclusiones denitivas, esto no es posible por la naturaleza y escasa evidencia documental
sobre este tipo de manifestación cultural que reexiona y cuestiona la identidad de los aborígenes
nicaragüenses.
2 La intervención en el lugar se da luego que se reportara desde el pasado 17 de mayo una cantidad significativa de piezas arqueológicas impactadas a raíz de la perforación de
una zanja geológica elaborada por la Empresa Nacional de Transmisión Eléctrica.
3 Los artefactos que el arqueólogo encuentra simultáneamente en un mismo sitio y en un mismo nivel, se dice que están asociados (Ferrero, 2000:23).
4 Denominación de un tipo de cerámica precolombina, por lo general en forma de zapato y caracterizada por presentar la técnica de brochado o “estrías” y tener en su superficie
tiras aplicadas que definían en muchas ocasiones el decorado de las vasijas (líneas, espirales y rasgos faciales tanto antropomorfos y zoomorfos). Por lo general, este tipo de
cerámica está vinculado con el período postclásico mesoamericano, es decir, la última etapa del desarrollo independiente de la civilización mesoamericana comprendiendo el rango
de 900 d.C. al 1521 d.C.
5 Este esfuerzo inicial es la punta de lanza para el registro apropiado de este tipo de estudio y se debe pensar en un proyecto base a futuro que registre, catalogue y contextualice
motivos iconográficos en contextos similares u otra índole, considerando que las fuentes junto a su correcta lectura e interpretación son claves ya que aportan nuevos enfoques a
la ciencia arqueológica.
67
artículos
Mirando a la muerte: Análisis iconográfico Sacasa Estriado
Revista Humanismo y Cambio Social. Número 10. Año 4. Julio-Diciembre 2017 Pág 64-79
Contextualización
El área de estudio se sitúa al Sur de la capital Managua, precisamente en la zona Metropolitana.
Políticamente, el sitio arqueológico corresponde al distrito I de Managua, especícamente en Villa
Tiscapa, de la gasolinera PETRONIC Bolívar, 2 cuadras al Sur, ½ al Este, frente al automotel París
en la 22 calle suroeste en predios de ENATREL en las coordenadas geográcas, 12°07´51´´de
latitud Norte y 86°16´24´´longitud Oeste.
El lugar se extiende sobre un espacio de aproximadamente 180 metros de largo (de Este a Oeste)
y supera los 300 metros de ancho (de Norte a Sur), área que aparece conformada por terrenos
pocos elevados con pendiente al Noroeste y con un relieve regularmente accidentado por la
depresión tectónica denominada Graben de Managua, localizada sobre una activa cordillera
volcánica cuaternaria que atraviesa en dirección Sur-Este, que hace que los suelos sean de
fertilidad variante y de textura franco-arenoso y franco-arcillosos.
Las primeras aproximaciones a la cuestión iconográca en arqueología, tuvieron su punto de
explosión en la década de los 70 del pasado siglo en el Cercano y Medio Oriente, cuando los
estudios de tipología cerámica y el interés por lo oriental llevó a la aparición de abundantes
estudios de imágenes fenicios, egipcios, sirios y chipriotas, que desde entonces han sido la base
de nuevas propuestas metodológicas para la ciencia arqueológica.
A nivel regional, estudios que acuerpan este enfoque metodológico son los trabajos realizados
por Spinden (1975), al declarar que el mismo símbolo puede tener signicados distintos según
el contexto en el que aparece; Stevenson (1988) describe íconos y símbolos en la cerámica
pintada de Gran Nicoya y López Austin (1990) realiza un análisis iconográco de la serpiente
y el jaguar. Por su parte, Cabello (1980) puntualiza sobre el signicado del jaguar en pueblos
mesoamericanos de chorotegas
6
y nicaraos a partir del análisis de las tipologías cerámicas
Papagayo, Birmania, Mora, Granada Polícromo. Asimismo, se destaca el trabajo de Desrayaud
(2011) quien ensaya un estudio icono-morfológico en 326 piezas de tradición esgraado/inciso
de Gran Nicoya en los siglos (I-XVI d.C.), en este realiza seriaciones morfológicas y un análisis
iconográco detallado de los mismos.
68
artículos
Kevin González
En el plano nacional los estudios semióticos e iconográcos aplicados al campo de la arqueología
son escasos; no obstante, hay aportes signicativos desde el análisis del arte rupestre; entre ellos,
Matilló Vila (1965, 1968, 1973) describe y categoriza petroglifos de la Isla El Muerto y Ometepe.
Otro aporte es el estudio de Gámez (2004) quien analiza los petroglifos de la cuenca del río Estelí,
como elemento de identidad de esa región. Por su parte, Navarro (1996, 2010) tanto en la Isla
de Ometepe, Zapatera, El Muerto y en los alrededores del Momotombo y Momotombito, al igual
que Suzanne Baker (2003) han brindado valiosos aportes al tema iconográco y semiológico en
relación a la cultura material.
En lo que respecta a urnas funerarias o cerámica con características en forma de zapato han sido
reportadas desde tempranas fechas a decir, Squier (1860) en su libro “Nicaragua, Sus Gentes y
Paisajes”, refiere sobre cementerios antiguos como los más notables restos de los aborígenes;
“encuéntreseles comúnmente en terreno seco y elevado, cercados de piedras lisas y ordinarias,
semienterradas. Allí, suelen hallarse muchas ollas llenas de usos y cenizas de muertos, así como
gran diversidad de ornamentos de piedra y de metal” (p.411). Bransford (1881), por su parte,
describe este tipo de cerámica con estrías en excavaciones desarrolladas en la Isla de Ometepe,
al igual que Healy (1980), Haberland (1993), (García, et., al, 1996), en Tolesmaida, Rivas.
Otros sitios próximos al área de estudio que han reportado este tipo de cerámica son los de
Managua Metropolitana estudiados por Lange et al. (1996) en Villa Tiscapa; Zambrana Vallejos y
Moroney (2012) en Oro Verde zona 7 de Ciudad Sandino; Espinoza, García y Suganuma (1999)
en la zona de Malacatoya, Granada. También se cuenta con estudios realizados en el RURD
7
de la UNAN (Balladares, Delno y Lechado, 2001); asi como los de McCafertty (2010) en Santa
Isabel, Tepetate y El Rayo cerca de San Jorge, Rivas.
Aparentemente, el sitio arqueológico Villa Tiscapa presenta grandes dimensiones en relación a
estos sitios contemporáneos y su ocupación se enmarca dentro del período postclásico, cuya
extensión temporal va desde el año 800-1520 d.C. En este período las urnas Sacasa Estriado
se encuentran entre los objetos más característicos de la época postclásico en el Pacíco de
Nicaragua (McCafertty, 2012, p.5) lo que explica que esta práctica de enterrar a los muertos en
urnas funerarias es una característica común de todos los pueblos que habitaron esta región,
así como de otras de América Central, especícamente en el área de Gran Nicoya
8
(Zambrana
y García, 1995, p.10).
Metodología
Para una mejor comprensión de las sociedades que crearon este tipo de cerámica y en aras de
desentrañar el signicado que revisten, conviene retomar el análisis iconográco o reconocimiento
de la imagen, mientras la comprensión del mensaje recae en el análisis iconológico, ambos
propuestos por autores como Panofsky
9
y otros como Saussure (1945) y Peirse (1974); este
último lo aborda al igual que Panofsky en tres niveles, el ícono, el índice y el símbolo, que en
pocas palabras implica que la intención última es el conocimiento del hecho histórico a través
de las representaciones artísticas.
En este caso, por ser la iconografía la que se ocupa del contenido temático o signicado de las
obras de arte, en cuanto algo distinto de su forma (Panofsky, 1980, p.13), se hace uso del análisis
pre-iconográco destacando la signicación primaria, natural o formas puras de los diseños
decorativos en la cerámica Sacasa Estriado, seguido de la fase iconográca, signicación
secundaria o convencional y/o relación entre motivos artísticos y temas vinculados al contexto
de producción de la imagen; la tercera fase es lo iconológico o signicación intrínseca o bien
aquellos “valores simbólicos
10
que inuyen en las formas.
6 Para el 800-1200 d.C. período de ocupación en el que se desarrollaron los Chorotegas en la zona, el motivo jaguar se constituyó en uno de los más comunes de este período al
punto que los indígenas lo representaron en vasijas efigies muy variadas.
7 Recinto Universitario Rubén Darío.
69
artículos
Mirando a la muerte: Análisis iconográfico Sacasa Estriado
Revista Humanismo y Cambio Social. Número 10. Año 4. Julio-Diciembre 2017 Pág 64-79
8 Este tipo de cerámica en forma ovoide con características de zapato ha sido documentado desde Chile hasta el Sur de Estados Unidos (Dixon, 1963 citado por McCafertty, 2012:5).
9 Los niveles de interpretación planteados por este autor son tres: el primero de ellos son los significados primarios se parte por intentar identificar la forma que tiene la obra de
arte y describir los motivos observados; el segundo nivel definido como significados convencionales persigue conectar las formas descritas en el nivel previo y definir algún nivel de
adscripción cultural o sociedades que la elaboraron; el último nivel se intenta situar a la obra en un contexto histórico-cultural determinado.
10 El término está vinculado con la construcción de las identidades en donde los actores sociales se apropian y hacen que los objetos y representaciones adquieran sentido en sus
relaciones intersubjetivas (tanto entre los actores como su necesidad de identificarse o diferenciarse).
11 Compuesto por cuatro entierros primarios (cuando el cuerpo mantiene su relación anatómica), 42 urnas funerarias con sus respectivas “tapaderas” definidos como entierros
secundarios (cuando los restos son removidos de su entierro primario y puesto en otro lugar ya sin guardar su relación anatómica). Además, 2 vasijas globulares del tipo Lago Negro
Modelado una de ellas con efigie zoomorfo, 1 mortero (pistilo) de escasas dimensiones, 2 pesas de red, 4 especie de discos cerámicos encontrados sobre la tapadera de una urna
funeraria y 1 cuenta para collar (objetos de ornamentación) procedentes de la excavación de rescate.
12 Existen otras formas de enterrar: decúbito dorsal, decúbito supino, flexionado, sentado o entierros de paquete (compuestos por el cráneo, la mandíbula y los huesos largos).
El sitio arqueológico estudiado pertenece a un contexto funerario
11
, resultado de una excavación
controlada por niveles arbitrados de 22 m², tanto de las evidencias impactadas como del
contexto arqueológico no alterado. La muestra seleccionada corresponde a 14 urnas funerarias
-las mejores conservadas- que después de haber sido cepilladas y limpiadas in situ, presentaban
características estilísticas muy claras. A esta muestra se le realizó una documentación fotográca
como recurso complementario para su análisis, ya que los hallazgos fueron trasladados hacia
el Instituto Nicaragüense de Cultura. Este tipo de estudio por lo general tiene una fuerte carga
subjetiva, debido a que se trata de un lenguaje no escrito plasmado en las urnas funerarias,
cuyas interpretaciones iconográcas pueden variar de acuerdo con las posiciones teóricas de
quien la investiga.
Una aproximación al lenguaje de las imágenes:
Sacasa Estriado
La función y signicado de la tipología Sacasa Estriado
es tema de discusión. Lo cierto es que está asociado
a prácticas funerarias donde lo primero que se hacía
era depositar al difunto de manera extendida
12
y
posteriormente se pasaba al entierro secundario,
donde el cadáver era exhumado para ser nuevamente
enterrado en una urna, posiblemente, en ceremonia
colectiva.
En cuanto al ajuar o los objetos colocados junto al
muerto, además de reejar la creencia en alguna
forma de vida después de la muerte, también son
indicadores ables para inferir en el estatus social, tal
y como sucedió en Villa Tiscapa donde las exequias de
los enterramientos en urnas parecen estar vinculados
a la gente del común, que generalmente era enterrada
(Tous Mata, 2008, p.187), aunque no sea regla, ya que
en contextos análogos se demuestra variabilidad en
el tratamiento mortuorio como lo ejemplica el patrón
de enterramiento en el sitio N-MA-65
13
(Balladares, et.
al., 2001) donde los depósitos funerarios presentaban
diversidad de ofrendas y ajuares namente acabados
vinculados a cementerios familiares.
Ilustración 1. Contexto mortuario y relación de entierros. Fuente: CADI-UNAN-Managua/adaptado por el autor.
70
artículos
Kevin González
Después de su clasicación taxonómica y del ordenamiento del conjunto de vasijas analizadas,
se evidencian dos grandes categorías: atractores existenciales o atractores simbólicos
14
(icónicos: antropomorfas y zoomorfas) y atractores abstractivos
15
(no icónicos), de acuerdo
con la tipología inicialmente reconocida. Dentro de esta perspectiva, el conjunto de rostros/
guras antropomorfas (n=11) constituyen el mayor porcentaje de representación icónica, otras
representaciones no determinadas (n=2) análogas a elementos zoomorfos y abstractos, que de
acuerdo con su análisis morfológico aparecen en formas de zapato con áreas no engobadas
y vinculado a escudillas que funcionan como tapaderas y bordes rotos, posiblemente para
introducir de forma más sencilla al individuo.
13 Corresponde al sitio arqueológico localizado en el sector sureste del Recinto Universitario “Rubén Darío”, UNAN-Managua.
14 El término atractor está relacionado con el reconocimiento de “algo” y vinculado con el concepto de memoria visual en el sentido que está conformado por determinadas
representaciones mentales.
15 Como bien se expresa “no icónicas”, está vinculado a una percepción cualitativa, es decir, en este tipo de estudio no intervienen elementos figurativos o simbólicos en la
composición de la imagen.
16 También, conocido como técnica del “oloteado”. Estudios etnoarqueológicos desarrollados por el CADI-UNAN-MANAGUA, demuestran que esa huella queda impresa durante el
tratamiento de la superficie de la vasija con el olote
Tabla 1. Identicación iconográca.
Representación iconográfica Antropomorfa Zoomorfa Total
Rostro 5 1 6
Figura 3 2 5
Abstracta 0 2 2
Naturaleza 0 1 1
Por su parte, las representaciones no icónicas están dadas por varios tipos de marcas, en
principio al igual que las formas icónicas determinadas por el uso de técnicas decorativas,
varias, entre ellos la presencia de estrías como atributo básico y el uso de técnicas decorativas
como el brochado
16
y aplique o pastillaje , ya sea para grabar ojos, cejas y otros rasgos faciales
de manera tosca. En efecto, sobresalen modelados gurativos o formas totales esculpidas con
vida humana, animal y elementos abstractos ligados posiblemente a la naturaleza.
Tabla 2. Esfera de análisis cerámica Sacasa Estriado
#
Objeto de
Estudio
Expresión/
Estilo
Significado
Intrínseco o
Contenido
Herramienta
Interpretativa
Ilustración
ANTROPOMORFAS
1 Motivo
cerámico
Gesto y actitud
asumido
Rostro
humano
Fuente
documental
e intuición
sintética
71
artículos
Mirando a la muerte: Análisis iconográfico Sacasa Estriado
Revista Humanismo y Cambio Social. Número 10. Año 4. Julio-Diciembre 2017 Pág 64-79
ZOOMORFAS
2 Motivo
cerámico
Lagartija/iguana Figura animal
(regeneración)
Fuente
documental
e intuición
sintética
ABSTRACTOS
3 Motivo
cerámico
Los diseños
involucran
proceso de
embarazo entre
ellos: forma
del estómago
abultado en
estado de
embarazo,
estrías, línea
alba y otros.
Rostro
humano
Fuente
documental
e intuición
sintética
17 Algunas vasijas muestran aplicaciones en su superficie lisa y plástica pequeñas bandas, cuentas, o figuras completas de barro (Ferrero, 1987:242).
NATURALEZA
4 Motivo
cerámico
Atmósfera Posibles
hojas como
elementos
de aplique
vinculados a
hojas/semillas
Fuente
documental
e intuición
sintética
El grupo de urnas con línea vertical permiten la aproximación a un primer plano de signicación
que posiblemente esté evocando movimiento, relación de equilibrio o símbolo del ser viviente
que crece hacia arriba y su vínculo con la fertilidad. Por su parte, la línea horizontal es una fría
posibilidad de movimiento, descanso y tranquilidad, o vinculado a que la tierra es llana, de modo
que es la línea como referente de comunicación gráca que determina el rasgo de cada diseño.
Otra característica identicada corresponde a las abstracciones, comprobándose trazos
imperfectos en varias direcciones, sobre todo de estrías como elemento determinante en
la muestra analizada por lo que el uso de elementos como la técnica de impresión, ha sido
interpretado como un símbolo de metáfora de animales y de fertilidad; además, se identicó el
uso de puntos, rectas, líneas en forma transversal en las decoraciones más sencillas como en
las más complejas.
Lo anterior debió ser resultado de un trabajo en conjunto; es decir, toda representación artística
admitió en la práctica un proceso de abstracción de la realidad, de modo que vincular variables
como arte y abstracción no es un tema nuevo y el tema de la ideología de nuestros ancestros
tenían muchos medios de expresión a través de símbolos codicados; en todo caso, la ideología
como un referente de hábitos tenía que ver con el espacio, los animales y las cosas que ocupaban
el cosmos, la naturaleza, el papel de los espíritus, lo sobrenatural y otros.
72
artículos
Kevin González
Entre lo simbólico y lo material
La elaboración de cerámica parece haber sido algo sencillo en el pasado; no obstante, su
origen como revelábamos no fue simplemente un acto de reexión, por el contrario, fue un
“comportamiento común a todos los hombres y sociedades” (Alcina, 1982, pp.28-29) y su origen
fue una verdadera revolución para actividades varias: almacenar y transportar líquidos, granos y
otros productos, y con el tiempo fueron inspirados como parte de las creencias de los pueblos
acompañados siempre de actitudes y prácticas especícas, como las ofrendas que suelen asistir
los entierros en diversas sociedades prehispánicas.
Justamente, una de esas actitudes como parte del sistema de creencias en Villa Tiscapa, eran las
costumbres funerarias
18
que indistintamente del tipo de sociedad o cultura a la que perteneció
el ritual de la muerte y los vínculos que de ella se desprenden, forman parte importante en
mayor o menor intensidad de su quehacer cultural. Es en todo caso en el momento de la muerte
que aspectos como la identidad social, el rol, la relación de identidad y persona social le son
conocidos al fallecido y determinan la naturaleza y los detalles del tratamiento mortuorio (Binford,
1972, p.28).
Sobre la base de lo planteado: ¿por qué este tipo de práctica?, ¿cuándo y por qué se decide ir
más allá de la mera funcionalidad para agregar un elemento estético particular en la cerámica,
en los petroglifos o en la arquitectura misma? Inevitablemente, estas son preguntas necesarias
que están sobre la mesa para entender el escenario de estudio que rodea a la cerámica Sacasa
Estriado y su vínculo con prácticas funerarias. A decir verdad, el simbolismo formó parte esencial
en las piezas cerámicas, tanto las impresiones causadas por las fuerzas naturales, la fertilidad y
la muerte, fueron sustanciales en la decoración de las mismas y adquirieron cierto componente
metafísico en la concepción precolombina.
En el caso de los antiguos pobladores de Nicaragua (Chorotegas y Nicaraos) y en general las
sociedades mesoamericanas vivían intensamente inspirados en nociones mitológicas y religiosas
que tienen su referente en el México antiguo desde el Pre-clásico o Formativo en donde se
produjeron los grandes mitos y con el tiempo fecundaron los dioses
19
, época en la que, además,
se materializan las “ofrendas” en los entierros junto con diversas formas de enterramiento, por lo
que la muerte ocupó un lugar preponderante.
Arriesgando más, y atendiendo al signicado primario o natural de las imágenes simbolizadas en
las urnas funerarias, el elemento nodal de los estilos parece estar vinculado -a como sucedió en
la cosmovisión precolombina- por leyes de la fertilidad y la dualidad que condujeron a un plano
mayor, el de regeneración.
18 Hacen referencia a ese conjunto de rituales y acciones que permean el proceso de morir, así como las exequias a las cuales se somete al difunto (Thomas, 1983).
19 Otro elemento era la arquitectura pública.
Vida y Muerte
Cielo y Tierra
Dualidad
Positivo y
Negativo
Causa y
Efecto
73
artículos
Mirando a la muerte: Análisis iconográfico Sacasa Estriado
Revista Humanismo y Cambio Social. Número 10. Año 4. Julio-Diciembre 2017 Pág 64-79
Al analizar esta trama recordamos sobre vida y muerte, de lo positivo y negativo, de causa y
efecto, de cielo y tierra. Asimismo, de la naturaleza que estaba en constante interacción y que
permitieron al artista precolombino fusionar esos conocimientos y sus mundos bajo el amparo
de la divinidad. En el caso de la percepción de regeneración puede entenderse en dos vías,
por un lado, la fertilidad de la tierra al haber presencia de agua que favoreciera la generación,
crecimiento y desarrollo de plantas y, por otro lado, la muerte de esos organismos vivos, así
como el reposo de la tierra, necesarios para dar paso a la regeneración de vida. No obstante,
se reviste de negatividad cuando el sol causa sequía por el exceso de calor y el cielo manda las
tormentas que llegan a provocar inundaciones, destrucción y hasta la muerte (Requena, 2013,
p.1).
En el orden de las ideas anteriores, resulta oportuno considerar que ese proceso de regeneración
manifestado en la tipología cerámica Sacasa Estriado puede asimilarse en el hecho de este tipo
de práctica ritual, donde luego de haber cumplido una función doméstica, su uso en contexto
funerarios signicó el regreso del muerto al útero materno; y la presencia de lagartijas como
elemento icónico, cobra en todo caso, un fuerte signicado simbólico, ya que son seres que se
transforman o renacen hacia otro estado de vida, permitiendo relacionar al mundo de las fuerzas
sobrenaturales con las actividades y preocupaciones materiales de la vida cotidiana.
Cabe agregar que al menos desde el período Bagaces (500 a.C.-300 d.C.) y su transición al
período Sapoá (800-1350 d.C.), la cerámica en Gran Nicoya se diversicó al punto que las
especies representadas aumentaron, aplicaciones y modelados de animales y personas son
muy comunes en las asas, soportes y cuerpos de ollas (Herrera, 2005, p.212). Quizás, en ese
mundo de creencias sobre la muerte y el alma, lo gurativo manifestado en cerámicas como
Sacasa Estriado, Lago Negro Modelado, Potosí Aplicado, Apompúa Modelado y otros, suelen
ser referentes en contextos funerarios y sus recurrentes imágenes, tienen un carácter poliformos
con rasgos que proyectan representaciones propias de la naturaleza en donde “los animales
tienden un puente entre los mundos, el de la vida diaria y la vida ritual” (Emery, 1999, p.507), lo
que supondría un carácter mitológico y supremo, es decir, que la naturaleza tiene fenómenos
que poseen ritmos inesperados.
Ven visiones e personas e culebras e lagartos e otras cosas temerosas, de que
se espantan e han mucho miedo, y en aquello ven que se quieren morir; é
aquellos que ven ho hablan ni les dicen nada más de espantarlos e algunos
de los que mueren tornan acá, y esos ven la visión de muchas maneras y
espantan a los que los ven(Oviedo, Libro XLII, cap. III).
74
artículos
Kevin González
Asimismo, testimonios coloniales y estudios especializados en el campo de la arqueología
sostienen que en la tradición mesoamericana, la dualidad y la muerte estaban profundamente
enraizados tanto en Chorotegas como en Nicaraos, quienes creían en la existencia del “yulio”
20
,
una especie de renacimiento:
“En muriendo, sale por la boca una como persona que se dice yulio, é vá allá
donde está aquel hombre é mujer, é allá está como una persona é no muere
allá y el cuerpo se queda acá” (Ibíd., 185-186).
Ese binomio inseparable (vida y muerte) formó parte de una misma actitud y práctica sustentada
en el sistema de creencias vigente en Villa Tiscapa, por lo que no necesariamente el término
muerte debió responder a lo eternamente negativo, o vida deba simbolizar lo positivo. Por
otra parte, el análisis realizado en ciertos elementos icónicos parece tener cierto vínculo con la
procreación y el embarazo; en efecto, hay motivos que personican una dimensión simbólica
de fertilidad que presenta características análogas al proceso de gestación, en principio por las
estrías que morfológicamente es congruente con el estado de embarazo de una mujer fecundada
y que, extrapolando ese escenario, indica aumento de peso y el proceso inicial de “concepción”.
Adicionalmente, aquellos elementos no icónicos sobre todo líneas verticales, horizontales
y transversales, podrían indicar quizás el cordón umbilical o bien la línea alba, esta última
relacionada con una mancha vertical que por lo general empieza en el nacimiento púbico y
termina en el ombligo, y a veces incluso, más arriba. Los rasgos estilizados o fusionados muchas
veces determinan el carácter diferencial de las vasijas; es decir, aunque el contexto de estudio
tiene estrecho vínculo con la ideología y religión, quizás su vínculo esté ligado con el tema de la
fertilidad y sus expresiones concretas en el vivir diario.
De acuerdo con las consideraciones en este escrito, el artista precolombino construyó un
mundo simbólico sobre la base de la invención, reinvención y adopción de circunstancias
que le permitieron precisamente la reproducción de diseños cerámicos como portadoras de
espacios de valor simbólico, de cotidianidad y de creatividad a través del tiempo, por lo que
entonces los signos identicados en la cerámica Sacasa Estriado no solo funcionaron como una
representación de la realidad social, sino también como elemento inuyente en las relaciones
sociales y en los cambios suscitados en este.
En efecto, variables como el origen o la creación, la naturaleza, los sistemas de creencias o
religiosos y la sociedad misma dieron paso al naciente arte en las culturas precolombinas
reejado en la cerámica con expresiones de animales ancestrales, imágenes de seres humanos
y mitológicos concebidos como representaciones del cosmos y la naturaleza, como sucedió
durante el período polícromo medio con la introducción de nuevos tipos cerámicos, es decir, de
cambios en la iconografía el escorpión, la serpiente emplumada, el dragón bicéfalo, el hombre
y el jaguar, todas de origen mesoamericana (Tous Mata, 2008, p.217) e inspirados en motivos
Mixteca-Puebla, lo que sugiere que las maneras de decorar se transformaron tanto como
evolucionaron las sociedades.
En consecuencia, muchos elementos sustraídos de animales fueron adquiriendo signicado,
por las cualidades físicas que tenían signicaban inmortalidad, poder, agilidad, tal como sucedió
con elementos icónicos representativos de la identidad mesoamericana, entre ellos el jaguar
y la serpiente en sus diferentes expresiones. Es así como una cantidad de especies cobran
importancia hasta llegar a ser divinizados.
20 El aire (alma) que mantenía con vida a los hombres, por lo que al morir una persona moría su cuerpo y su yulio emergía de su boca
75
artículos
Mirando a la muerte: Análisis iconográfico Sacasa Estriado
Revista Humanismo y Cambio Social. Número 10. Año 4. Julio-Diciembre 2017 Pág 64-79
Comentarios finales
Para nalizar, es necesario asentar que desde entonces el ser humano ha vivido en un mundo de
imágenes; este buscó la manera de expresar libremente lo que pensaba, por lo que logró dejar
impreso un sinnúmero de representaciones iconográcas como instrumentos mágico-religiosos
como sucedió con la tipología Sacasa Estriado.
Los motivos decorativos identicados en Villa Tiscapa representan un lenguaje abstracto y
simbólico relacionado con formas existentes en la naturaleza y el mundo, es decir, vida, muerte
y regeneración materializado en este tipo de cerámica, que luego de haber cumplido una función
utilitaria, sus protagonistas como parte del quehacer cotidiano y cultural, lograron impregnarle
una total espiritualidad capaz de darle sentido a la vida individual y colectiva.
Adicionalmente, el contexto funerario reere directa o indirectamente a ese elemento de la
dualidad, según nuestro análisis el entierro secundario o “posterior” depositando al individuo en
la vasija, responde a una revitalización del mito del origen o procreación o vinculado al proceso
de embarazo en donde la vasija se convierte en el agente de dicho proceso. En cambio, el
acto de enterrar maniesta ese otro mundo, es decir, la vida la que posibilita el inicio de un
nuevo renacer, la semilla que germina y regresa y del que Chorotegas y Nicaraos creían y vivían
intensamente a partir de sus nociones mitológicas, sobre todo porque mitigaba la incertidumbre
que su mortalidad les causaba y que seguramente era un tema recurrente en su pensamiento.
Por otra parte, este tipo de revelación mitológica y religiosa en el pasado agrupaba un carácter
eminentemente social, colectivo, donde las imágenes, entre ellas la iconografía del mito, obedecía
a determinados propósitos y no necesariamente elaborados al gusto propio de quien las creó;
al contrario, respondía a necesidades sociales del individuo precolombino, pero sobre todo por
una tradición ritual sustentada en un “corpus” al que con frecuencia llamamos cosmovisión
21
, ,
que remite a una articulación estructurada de los sistemas surgidos en una comunidad para la
aprehensión del mundo y para su acción en él (López Austin, 2007, p.151).
Por lo tanto, al abordar esta categoría ideológica, espiritual y mitológica, el artista en su
obra congura una obra más allá de una simple forma; la obra incorpora en su interior las
creencias que una persona o un grupo tienen sobre su realidad y que con el paso del tiempo se
convirtió continuamente en una tradición o herencia colectiva, y que desde la arqueología y en
concordancia con Binford, es entendida como un conjunto de atributos que varían de acuerdo
con el contexto social donde se produce.
En otras palabras, el tema iconográco en la cerámica representa sistemas comunicacionales
complejas; no obstante, cohesionan, enseñan, pero sobre todo contribuyen al fortalecimiento
de la identidad local y nacional. En denitiva, se propone realizar reexiones preliminares en
forma hipotética con la sana intención de motivar y abrir la discusión en relación a este tipo de
expresión material-cultural de excepcional talento legadas por nuestros aborígenes.
76
artículos
Kevin González
21 Por ejemplo, era frecuente en sociedades precolombinas la contemplación de imágenes que de una u otra forma ayudaban a establecer una especie de “conexión” por medio
del culto, en ocasiones complejos rituales en donde se creaba una especie de puente entre lo terrenal y lo divino que se también, se expresaba en la cotidianeidad de las personas.
Referencias bibliográficas
Alcina, J. (1982). Arte y Antropología. Madrid: Alianza Editorial.
Bransford, M. (1881). Investigaciones Arqueológicas en Nicaragua. Colección Cultural.
Managua: Banco Central.
Balladares, S Delno, D y Lechado, L. (2001). Intervención de Rescate Arqueológico Sitio
N-MA-65-UNAN-Managua. Informe de Investigación. CADI-UNAN.
Baker, S. (2003). Arte Rupestre de Nicaragua. En (Kunne, M y Strecker, M, eds.) Arte Rupestre
de México Oriental y Centro América.
Binford, L. (1994). En Busca del Pasado. Descifrando el Registro Arqueológico. Barcelona:
CRÍTICA.
Binford, L. (1972). Mortuary Practices: Their Study and Potencial. Approaches to the Social
Dimensions of Mortuary Practices. Memoirs of the Society for American Archaeology.
Washington, DC.
Cabello, P. (1980). Iconografía y Signicado del Jaguar en Pueblos Mesoamericanos:
Chorotegas y Nicaraos. Museo de América de Madrid. Recuperado de: https://revistas.ucm.
es/index.php/REAA/article/viewFile/REAA8080110043A/25259
Desrauyaud, G. (2011). Cerámica Monocroma Esgraada/Incisa de la Gran Nicoya (siglos
I-XVI d. C.). Recuperado de: https://jsa.revues.org/1998?lang=es
Espinoza, E, García, R y Suganuma, F. (1999). Rescate Arqueológico en el Sitio San Pedro,
Malacatoya, Granada, Nicaragua. 1era ed. Managua, Instituto Nicaragüense de Cultura,
Museo Nacional de Nicaragua.
Emery, K. (1999). Creando una Enciclopedia Computarizada: Los Animales Antiguos
de Mesoamérica. En XIII Simposio de Arqueología Guatemalteca, Museo Nacional de
Arqueología y Etnografía de Guatemala, Guatemala.
Ferrero, L. (2000). Costa Rica Precolombina. Editorial Costa Rica, San José.
Ferrero, L. (1987). Costa Rica Precolombina: Arqueología, Etnología, Tecnología, Arte. -2ª.
Ed.- Editorial Costa Rica, San José. pp. 489.
Gámez, B. (2004). Registro Arqueológico de los Petroglifos de la Cuenca del Río Estelí.
ADESO Las Segovias/SINSLANI.
García, et., al. (1996). Hallazgo Arqueológico en el Barrio Las Torres (N-MA-38), Managua:
Un Posible Cementerio con Entierros Múltiples. En Abundante Cooperación Vecinal: La
Segunda Temporada del Proyecto “Arqueología de la Zona Metropolitana de Managua”.
Alcaldía de Managua.
Haberland, J. (1993). Archaeological Research in Nicaragua. Washington City. Published by
the Smithsonian Institution.
77
artículos
Mirando a la muerte: Análisis iconográfico Sacasa Estriado
Revista Humanismo y Cambio Social. Número 10. Año 4. Julio-Diciembre 2017 Pág 64-79
Herrera, A. (2005). Al Reencuentro de los Ancestros: Mwaing daamalut. Kokapoijmi. Editorial
ICER: San José, Costa Rica. pp. 322.
Healy, P. (1980). Archaeology of the Rivas Region, Nicaragua. Recuperado de: https://
books.google.com.ni/books?hl=es&lr=&id=9Hdt1qmNDk8C&oi=fnd&pg=PR9&dq=paul+he
aly+1980&ots=uXE6jwKlhN&sig=2t8k8gQQUb6-gfokeoUPi5ruxyk#v=onepage&q=paul%20
healy%201980&f=false
Lange, F. (1996). Los Antecedentes y los Resultados de la Segunda Temporada del Proyecto
Arqueología de la Zona Metropolitana de Managua. En Abundante Cooperación Vecinal: La
Segunda Temporada del Proyecto “Arqueología de la Zona Metropolitana de Managua”.
Alcaldía de Managua.
López, A. (1990). Los Mitos del Tlacuache: Caminos de la Mitología Mesoamericana. Alianza
Editorial Mexicana. pp. 542.
MacCafertty, G. (2010). Etnicidad Chorotega en la Frontera Sur de Mesoamérica. Recuperado
de: http://revistas.ues.edu.sv/index.php/launiversidad/issue/view/31
MacCafertty, G. (2012). Ollas en Forma de Zapato Tipo Sacasa Estriado: Función y
Signicado. Recuperado de: http://antharky.ucalgary.ca/caadb/sites/antharky.ucalgary.
ca.caadb/les/Ollas_Zapatos_2012.pdf
Matilló, J. (1965). Estas Piedras Hablan. Editorial Hospicio. León, Nicaragua. pp. 224
(1968). El Muerto. Isla Santuario: Estudio de su Arte Rupestre. Imprenta Nacional. pp. 71.
(1973). Ometepe, Isla de Círculos y de Espirales: Estudio del Arte Rupestre Isleño. Centro
de Investigaciones Rupestres.
Navarro, R. (1996). Arte Rupestre del Pacíco de Nicaragua, Las Variaciones de las
Representaciones entre la Costa del Pacíco y el Lago Cocibolca. Fondo Editorial INC/
ASDI/Editorial UCA.
Navarro, R. (2010). Documentación de Arte Rupestre en los Volcanes Momotombo y
Momotombito. Informa Final. (Inédito).
Panofsky, E. (1980). Estudios sobre Iconología. Alianza Editorial, España. Recuperado de:
http://www.hamalweb.com.ar/archivos/Panofsky-Estudios-Sobre-Iconologia-Capitulo-I.pdf
Peirse, Ch. (1974). Clasicación de los Signos. En la Ciencia de la Semiótica. Nueva Visión,
Buenos Aires. Recuperado de: http://www.inpi.edu.ar/wp-content/uploads/2017/03/
Clasicacion_de_los_signos-Pierce.pdf
Popescu, L y Martínez, J. (2007). Entrevista a Alfredo López Austin. Recuperado de: www.
raco.cat/index.php/ExNovo/article/download/144754/196574
Requena, N. (2013). No para Siempre en la Tierra, sólo un poco aquí…La Muerte y el México
Prehispánico. Expedicionario: Boletín de la Escuela de Antropología e Historia del Norte de
México, N°3. Recuperado de: http://eahnm.edu.mx/el-expedicionario/expedicionario-2-3-
noviembre-2013/
78
artículos
Kevin González
Saussure, F. (1945). Curso de Linguística General. Editorial Losada S.A. Moreno 3362,
Buenos Aires. Recuperado de: http://fba.unlp.edu.ar/lenguajemm/?wpfb_dl=59
Spinden, H. (1975). A Study of Maya Art: Its Subject Matter and Historical Development.
New York. pp. 342.
Stevenson, D. (1988). Iconos y Símbolos: la Cerámica Pintada de la Región de Nicoya. Vol.
9, N°15. Recuperado de: https://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=4007900
Squier, E. (1972). Nicaragua, Sus Gentes y Paisajes. Editorial Universitaria Centroamericana
EDUCA. Ciudad Universitaria Rodrigo Facio, Costa Rica.
Tous Mata. (2008). De Protagonistas a Desaparecidos, Las Sociedades Indígenas de la Gran
Nicoya Siglos XIV a XVII. Primera Edición. Grupo Editorial Lea, Managua.
Thomas, L. (1983). Antropología de la Muerte. México, Fondo de Cultura Económica.
Zambrana Vallejos, O y Moroney, B. (2012). Ciudad Sandino: Un Legado Prehispánico.
Dirección de Patrimonio Cultural y Alcaldía de Ciudad Sandino. Recuperado de: https://
antharky.ucalgary.ca/caadb/sites/antharky.ucalgary.ca.caadb/les/CIUDAD_SANDINO.pdf
Zambrana, J y García, R. (1995). Rescates de Entierros Secundarios en Urnas Funerarias
en los Sitios N-MA-24 Las Brisas y N-MA-35 El Ferrocarril. En Descubriendo las Huellas de
Nuestros Antepasados. (Lange, editor). El proyecto “Arqueología de la Zona Metropolitana
de Managua”. ALMA, Managua, INC, DPC, MNN, University of Mobile Latin American
Campus: San Marcos, Carazo y Universidad de Colorado (Boulder). Managua.
79
artículos
Mirando a la muerte: Análisis iconográfico Sacasa Estriado
Revista Humanismo y Cambio Social. Número 10. Año 4. Julio-Diciembre 2017 Pág 64-79
Kevin González Hodgson
1
Arqueólogo e investigador
Centro Arqueológico de Documentación e
Investigación
CADI-UNAN-Managua
ORCID. 0000-0003-1127-4309
hodgsonk27@hotmail.com
Arte den óleo, artista desconocido.