Raíces
53
Dinámicas eco protectora: Sanación y Apache...Tiziana Rossetti
Revista Nicaragüense de Antropología Año 3 No.5 | 2019 Enero - Junio
incluso podría no permitir el avance del mismo. La co-
munidad de Nandayuri se encuentra en el barrio de
Monimbó, lugar que fue triste escenario de enfrentami-
entos violentos que dejaron varios muertos y un entorno
polarizado. La población local aún tiene rezagos de mie-
do e inseguridad, podría eso afectar la investigación di-
rectamente, ya que al ser una persona externa (investi-
gador) de la localidad y además el nivel de polarización,
podría crear malos entendidos en la comunidad con los
comunitarios y autoridades locales. Por esa razón, la ac-
tividad de campo está parcialmente suspendida.
¿Cuáles preguntas auténticas me quedan
aún abiertas?
Investigando la cosmovisión y los sistemas de va-
lores y saberes como componentes dinámicos de la
comunidad, se procura entender y conocer la con-
cepción de vida deseable propia del pueblo indígena
de Monimbó que vive en Nandayuri e identificar con
ellos cuáles son las necesidades, conocimientos y ex-
periencias, que la comunidad solicita para alcanzarla.
Por este fin, ¿Sería útil, como producto final de la investi-
gación, diseñar con la comunidad un proyecto o estrate-
gia alternativa de sustentabilidad para la comunidad?
También reflexionar sobre ¿Como la cooperación
internacional debería actuar para incluir la visión
y saberes de los pueblos indígenas en la construc-
ción de “planes de desarrollo” que sean realmente
endógeno (no impuesto desde a fuera), representan-
do la real aspiraciones y deseos de las comunidades
locales y por lo tanto alcanzarían la auspiciada par-
ticipación, apropiación y, sobre todo, sostenibilidad?
Conclusión
Los pueblos indígenas chorotegas del Centro y Norte de
Nicaragua, tras cinco siglos de aculturación, han sido
despojados de su religión, de su lengua, de su cosmov-
isión, de sus formas de producción y de sus formas de
organización y de parte o de todas tierras comunales.
Monimbó cuenta con un título real de propiedad de 7
caballerías antiguas, que fue otorgado por el Reino de
España representado por la Capitanía General de Gua-
temala el 16 de Marzo de 1.714. Este título se encuentra
desaparecido a consecuencia de los conflictos bélicos y
persecución a los mismos documentos. Los Estatutos de
la Comunidad Indígena de Masaya fueron aprobados
por Acuerdo ejecutivo del 14 de enero de 1915, siendo
sometidos a revisión en el año 2012 para su adecuación
a la legislación contemporánea, como es el caso de la
Constitución de la República de Nicaragua, el Convenio
No 169 de la OIT y la Declaración de las Naciones Uni-
das sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas.
A finales del siglo XIX el territorio colectivo de Monimbó
fue individualizado por el Estado re- partiéndose en
grandes fincas a terratenientes y pequeñas parcelas a fa-
milias indígenas y en los años 80 del siglo pasado parte
de sus tierras fueron distribuidas a cooperativas de pro-
ducción. Actualmente la propiedad colectiva se limita
a cuatro cementerios indígenas y una instalación para
actividades comunitarias, que son administrados por el
Concejo de Ancianos de Monimbó.
La pérdida del control del territorio no ha impedido que
el pueblo indígena de Monimbó mantenga su continui-
dad histórica y cultural, con su patrimonio material e
inmaterial que es la principal fuente de mantenimiento
de su identidad ancestral incuestionable. Como bien lo
señala Javier García Bresó, se trata de un caso de iden-
tidad étnica especial que ha sido capaz de sobrevivir al
paso del tiempo y a los profundos cambios producidos a
través de la historia, en la cual en muchas ocasiones fue
dominada, marginalizada y humillada.
La comarca de Nandayuri, que pertenece a este terri-
torio, es una población periurbana de tradición indíge-
na-campesina, cuya identidad indígena es fruto del me-
canismo de resistencia que Bresó denomina, siguiendo
las ideas de Vogt, “encapsulación”, es decir, “el proceso
por el que nuevos elementos impuestos desde afuera
son conceptual y estructuralmente incorporados a pa-
trones existentes de comportamiento social y ritual”.
Tanto es así que, hoy en día, su identidad se fundamenta
precisamente en el hecho de haber mantenido algunas
tradiciones de clara influencia colonial, con un apego
especial y que ha construido la territorialidad a partir
de sus tradiciones y organizaciones propias, como las
Alcaldías de Vara, Concejo de Ancianos, la Cofradía y
Junta Administrativa.
Sin embargo, los proceso de aculturación se manifiestan
en el desconocimiento de la lengua originaria, en la
normalización occidental de la educación escolar, en la
politización partidaria de los liderazgos comunitarios,
en el creciente peso en los ingresos monetarios deriva-
dos de la comercialización de los recursos naturales y
productos de artesanado, en el trabajo asalariado como
temporeros y en la dependencia de la actuación de la
municipalidad y del gobierno para mejorar sus servicios
básicos (educación, viviendas, caminos, fuentes, electri-
cidad, protección del medioambiente).
No obstante, el fuerte vínculo que los pobladores de
Nandayuri tienen con su estructura económica tradi-
cional de producción agrícola y artesanal, con todos
sus aspectos relacionados, cuales, ritos, festividades, al-
imentación, así como con la gran cantidad de leyendas,
cuentos, mitos e historias, que se han ido transmitiendo
de generación en generación, hace que aun conserve
una forma de vida de origen ancestral. Se puede afirmar