Raíces
Revista Nicaragüense de Antropología Año 2 No.4 | 2018
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En el pensamiento de Elizalde: Descubriendo las estruc...José Ramón Velásquez
José Ramón Velásquez Hernández
Docente Departamento de Antropología
Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua, Managua
http://orcid.org/0000-0001-9743-1541
Recibido: 15-10-2019
Aceptado: 21-11-2019
En el pensamiento de Elizalde: Descubriendo las estructuras
profundas del capitalismo
In Elizaldes thought: Discovering the deep structures of capitalism
Resumen
Este ensayo cuyo título ha sido denominado: En el pensamiento de Elizalde: Descubriendo las estructuras
profundas del capitalismo, pretende ser una reexión y una crítica sobre la construcción de una nueva
cultura basada en un modelo de consumo, que induce a los seres humanos a realizar esta práctica sin el
mínimo cuestionamiento sobre lo que hacen y sobre los efectos nocivos que provocan a la naturaleza y a
ellos mismos. La sostenibilidad encuentra un obstáculo en el sistema económico de producción capitalista,
porque toda práctica económica que incluya lo sostenible como eje transversal constituye la antítesis del
sistema. En este ensayo se propone mostrar las formas de vivir tradicionales, como la de pueblos originari-
os, comunidades étnicas y comunidades campesinas, aplican estrategias de vida que incorporan sostenibil-
idad. Invito al lector a seguir las líneas de esta reexión y crítica al ensayo titulado: ¿Qué desarrollo puede
llamarse sostenible en el siglo XXI? La cuestión de los límites y las necesidades Humanas.
Palabras claves: substantivo, formalismo, economía, producción
Abstract
This essay whose title has been called: In the thought of Elizalde: Discovering the deep structures
of capitalism, aims to be a reection and a critique on the construction of a new culture based on a
model of consumption, which induces human beings to perform this practice without the minimum
questioning about what they do and about the harmful effects they cause to nature and to themselves.
Sustainability nds an obstacle in the economic system of capitalist production, because any economic
practice that includes the sustainable as a transversal axis constitutes the antithesis of the system. In
this essay, it is proposed to show traditional ways of living, such as that of indigenous peoples, ethnic
communities and peasant communities, applying life strategies that incorporate sustainability. I invite
the reader to follow the lines of this reection and criticism of the essay entitled: What development
can be called sustainable in the 21st century? The question of limits and Human needs
Keywords: substantive, formalism, economics, production
En la producción los hombres no actúan solamente sobre la naturaleza,
sino que actúan los unos sobre los otros. Marx.
El capital. Edición argentina. P 127-128
1) Inspirado en el texto: ¿Qué desarrollo puede llamarse sostenible en el siglo XXI? La cuestión de los límites y las necesidades Humanas .
2) Agradecimiento especial a los Fondos para proyectos de investigación FPI de UNAN-Managua.
Copyright © 2018 UNAN-Managua.
Todos los Derechos Reservados.
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Desarrollo comunitario
Desarrollo
La sociedad occidentalizada en la que se ubica el ser
humano, está construida de esquemas y parámetros
de la cultura hegemónica, que lejos de construir un
imaginario social donde se reconozca el grado de com-
plejidad de otras culturas y la forma en como estas ha
actuado con su medio social y natural, han reivindica-
do la escuela evolucionista del siglo XIX, donde se con-
sideraba la supremacía cultural y económica de una
sociedad y de una cultura en relación a otras.
Este modo único de comprender el mundo, es legitima-
do por el capitalismo “racional”, en donde se invisibi-
liza por completo a otros pueblos y culturas originarias
que han practicado sustentabilidad, incluso antes de
que el concepto como tal hiciera su aparición en 1987,
y que en denitiva practican una relación racional con
su medio natural, a diferencia del sistema económico
de producción capitalista, que además de tener una
lógica extractiva, es también depredadora del medio
natural, precisamente por derivar del cálculo totaliza-
do de los intereses parciales de acuerdo al planteami-
ento de Elizalde.
El principio de sostenibilidad simplemente no tiene
aplicación dentro del capitalismo, ni funciona con in-
dividuos que están inmersos en una especie de anomia
social, con un sistema que individualiza las concien-
cias y por consiguiente las acciones sociales, estamos
ante un sistema económico que petrica al individuo,
lo vuelve ensimismado, envuelto en una especie de
autismo social, esto reeja las estructuras internas del
capitalismo y su manera estratégica de inmiscuirse en
las más recónditas estructuras mentales, y dominar la
cognición y el imaginario, homogenizando la manera
de pensar, porque de acuerdo al planteamiento estruc-
turalista de Levi-Strauss
3
, las estructuras sociales y el
sistema de normas tienen lugar primeramente en las
estructuras mentales.
De modo que el ser humano con independencia de
su género y su posición generacional, condiciona a la
práctica del consumismo, sin dar lugar a la más míni-
ma reexión sobre esta práctica, encontrándose com-
pletamente alienado por el sistema de dominación
capitalista, no solamente desde el punto de vista
económico, sino también culturalmente, aspecto últi-
mo que necesita mayor profundidad en el análisis que
hace el autor. Elizalde cita a Riechmann; 2008: 304)
“sin una vigencia renovada de los valores ecosocialis-
tas de cooperación y solidaridad no cabe pensar en una
salida de la crisis ecosocial que hoy está arrasando el
mundo”.
El problema que se nos plantea siempre es el de em-
ular modelos. Por algo el exacerbado neoliberalismo
fracasó en América Latina y particularmente en Nica-
ragua, después del famoso ajuste estructural dictado
por el llamado consenso de Washington, en donde
simplemente no funcionó, porque la dinámica cultural
es diferente a los países donde se origina el modelo,
de igual manera el ecosocialismo puede ser enten-
dido como un modelo generalizante, propio de una
sociedad y cultura occidental, sin embargo Bansart,
A(2009) en su planteamiento ecosocialista propone:
este socialismo debe ser endógeno, la dialéctica entre
praxis y teoría, debe surgir de las entrañas mismas de
nuestra América, no debe venir de unos pensadores
encerrados en una torre de marl de una universidad
o centro de investigación, algún cientíco social, sino
de las comunidades de base”.
Pero esta propuesta debe venir de las comunidades que
se ubican en los barrios, comarcas rurales, comuni-
dades étnicas, pueblos originarios, tomando en cuenta
que cada sector tiene sus propias particularidades en
las redes sociales y que sus estructuras también serán
diferentes, por lo tanto para desarrollar cualquier tipo
de propuesta que pueda ser sostenible en términos de
desarrollo deben de partir de entornos microsociales
con contextos particulares si quisiéramos pensar como
Franz Boas
4
, de considerar cada cultura desde sus con-
textos culturales particulares.
Elizalde retoma en sus análisis a Hinkelammert (2008)
para hacer referencia a: Saber que el respeto al conjun-
to es condición de su propia vida. No se sacrica por
los otros, sino que descubre que en el conjunto de los
otros puede vivir”.
Se está completamente de acuerdo con la propuesta
porque en la arquitectura social de cada persona hay
un diseño social que establece la relación con otros
3) Antropólogo francés, creador de la escuela estructuralista.
4) Franz Boas, Antropólogo norteamericano, creador del particularismo
histórico y del relativismo particular.
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seres humanos, en el entendido de que la cultura se
socializa, es compartida y es socialmente aprendida.
Al respecto Bansart (2009) fundamenta que: quién
actúa, quien se va haciendo, quien permite a los indi-
viduos hacerse, desarrollarse, realizarse, es la comu-
nidad”
Pero este sentido de comunidad, de colectividad y de
autopertenencia, se reeja de una manera más directa
en contextos rurales, de modo que no existe sustent-
abilidad en el marco del desarrollo en general, ni del
desarrollo rural en particular, sin esa visión de comu-
nidad.
Continuando con el replanteamiento de qué desarrol-
lo puede ser sostenible en el siglo XXI, Karl Polanyi
de la escuela substantivista en el marco de la antro-
pología económica, hab-
la de dos conceptos en
que se puede entender
la economía: 1) el sig-
nicado sustantivo de lo
económico, deriva de la
dependencia del hombre
para su subsistencia de la
naturaleza y de sus seme-
jantes, se reere al inter-
cambio con el medio nat-
ural y social, en la medida
en que este intercambio
tiene como resultado pro-
porcionarle los medios
para su necesaria satisfac-
ción material.
2) En el signicado formal de lo económico deriva del
carácter lógico de la relación medio-nes, tal y como
aparece en económico (barato) economizar (ahorrar).
Se reere a la concreta situación de elegir, especial-
mente la elección entre los distintos usos que provo-
ca la insuciencia de los medios (Polanyi en Godelier;
1976).
En el concepto formal de lo económico Polanyi hace
referencia a la elección, porque hay escases, esto es
un tanto contradictorio con la utopía de la abundancia
innito de Carosio (2008) citado por el autor.
En el marco de la economía formal, normativa y occi-
dentalizada, vende la idea de los escases porque hay
sector privilegiado que acapara de manera obscena la
riqueza a expensas de una sociedad mayoritariamente
empobrecida por el sistema. Pero en el polo opuesto
de la ciencia económica formal, está el substantivis-
mo, en donde destaca la dependencia del ser humano
con respecto a la naturaleza y a sus semejantes para
su subsistencia. Por lo tanto, el ser humano es interde-
pendiente de la naturaleza y relaciones que puede tejer
en contextos especícos para garantizar sus medios de
vida.
Un ejemplo substantivo de lo económico y que den-
itivamente tiene que ver con sostenibilidad y sustent-
abilidad, son las comunidades Mayangnas de Nica-
ragua, este pueblo originario existe desde antes que
existiera el estado-nación, y constituyen los garantes
de la preservación y conservación de la reserva de
Bosawas, uno de los más importantes pulmones nat-
urales de América Latina, y ¿Cómo lo hacen? En el
territorio Mayagna Sauni
Bu (número 2 ) ubicado
a lo largo del río Bocay
(Jinotega-Nicaragua) las
comunidades fundamen-
tan su práctica económi-
ca y su relación con la
naturaleza, a través de
lo que en Antropología
Jurídica se conoce como
derecho consuetudinario,
sistema de normas dado
por la costumbre y no por
un cuerpo de leyes dic-
tada por el derecho pos-
itivo, resulta que una fa-
milia compuesta por seis
miembros, de acuerdo a la norma, solamente tienen
derecho a pescar tres peces del río Bocay, y a cazar
un animal comestible de la reserva de Bosawas, este
animal puede ser un armadillo, una guardatinaja, etc.
De acuerdo este tipo de normativa quien incumpla lo
establecido es sancionado por la comunidad, esta prác-
tica se establece con el propósito de reservar un stock
(reserva) para las generaciones futuras, esta estrate-
gia de sustentabilidad existe desde antes que Brutland
presentara su informe en 1989 en Brasil.
Los modelos occidentales no han funcionado, porque
son productores y reproductores de las desigualdades
sociales y de una hecatombe ambiental sin precedentes
en la historia, son los modos de vida alternativos los
que han establecido una estrecha relación entre sus
prácticas y estrategias de sobrevivencia con el me-
Los modelos occidentales no han funcionado,
porque son productores y reproductores de las
desigualdades sociales y de una hecatombe ambi-
ental sin precedentes en la historia, son los modos
de vida alternativos los que han establecido una
estrecha relación entre sus prácticas y estrategias
de sobrevivencia con el medio natural, entonces
encontramos el vínculo-sociedad-cultura-medio-
ambiente.
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dio natural, entonces encontramos el vínculo-socie-
dad-cultura-medioambiente.
Lo fundamental estriba en cuestionar las estructuras
internas del capitalismos, conocer a profundidad sus
estructuras y funcionamiento, para luego hacer pro-
puestas, no para remediar el sistema como es la in-
tención del capitalismo verde, la desmaterialización u
otras propuestas para sanear el sistema decadente, se
trata hasta cierto punto de no reconocer las estructuras
profundas del sistema, porque el sistema como tal es
incuestionable, a propósito: Ramonet(2006) plant-
ea:” La globalización esta vez trata de presentarse con
ese carácter de cienticidad, con la idea de que podemos
discrepar en todo, el debate es posible en todo, menos en
una cosa, la economía”.
En este sentido del capital neoliberal, se convierte en
un dogma, en una fe incuestionable, Popper estaría
en desacuerdo, porque llama a someterlo todo a un
examen, a falsearlo. Porque se están buscando nada
más tratamiento y curas a un sistema que padece una
especie de cáncer metastásico, con suras en todas sus
estructuras, cabe resaltar que más que plantear una
crítica profunda al sistema económico, el autor hace
una especie de eclecticismo en donde cada autor brin-
da su postura sobre el desarrollo sostenible.
No solamente estamos hablando de un problema de
desigualdades sociales, se está ante un problema éti-
co-moral, se han sustituido los valores comunitarios, la
solidaridad, la reciprocidad de la que habla el etnólogo
francés Marcell Mauss, por lo valores del mercado.
Lo que no se menciona en el ensayo de Elizalde, es que
la humanidad ha caído en una especie de masa amorfa
cultural, adoptando un patrón de cultura que envuelve
al individuo en una especie de capsula social, vivien-
do su propia realidad, un submundo que lo obliga de
alguna manera a desinteresarse por el otro, a volverse
completamente insolidario con sus semejantes, con tal
de no comprometer su comodidad y su estilo de vida
consumista y alienante, estamos ante un ser humano
que ha sobrepuesto lo importante por lo urgente, es
urgente adquirir por cualquier medio el celular de úl-
tima generación, pero no se preocupa por los niños de
su barrio y su comunidad que sufren hambre o que no
pueden ir a la escuela porque no tienen un cuaderno
para tomar anotaciones y esto es importante.
La verdadera libertad está en libertad de la conciencia,
esto tiene una connotación ético-axiológico, cuando
la persona como poseedor de raciocinio lucha contra
todas las formas de egoísmo, de acuerdo al pensam-
iento de Elizalde, en una de sus conclusiones plant-
ea la necesidad de compartir con aquellos que tienen
menos, y eso es la solidaridad, un término que podrían
borrarlo de la mente humana las acciones mezquinas.
Al respecto Núñez Soto(1995) plantea: “La vida comu-
nitaria como ideal de vida y como solución frente a las
injusticias, ha estado presente prácticamente en todos los
reformadores sociales, desde la literatura utópica, hasta
los movimientos rebeldes y muchas experiencias aisla-
das”.
La solidaridad es a mi juicio, el eje transversal de toda
vida comunitaria, se está de acuerdo que las transfor-
maciones empiezan por la mente del individuo como
tal, pero lo medular de la transformación debe estar
en la comunidad, porque si no se sigue pensando en
el individuo y no en la colectividad social, que es por
donde deben impulsarse las transformaciones sociales,
políticas, económicas y ecológicas, para que el desar-
rollo sustentable.
El sistema económico de producción capitalista, es
completamente adversario de una visión y práctica de
sostenibilidad y sustentabilidad por su lógica de acu-
mulación, de manera que no es posible la coexistencia
del capitalismo con un medio natural que tenga equi-
librio ecológico.
Es este sistema a través de su proyecto ideológico, que
ha convertido al individuo en egoísta y consumista que
lo obliga a seguir patrones culturales que están com-
pletamente fuera de su identidad cultural.
Las propuestas citadas por el autor como: el capitalis-
mo verde, la desmaterialización, el decrecimiento, la
biomímesis, el principio de abajamiento y la ética del
consumo, no son más que propuestas que buscan curar
a un sistema que tiene una enfermedad terminal, pero
no cuestionan al sistema como tal, porque es un dog-
ma, nada es permitido fuera de su marco regulatorio:
el mercado.
Finalmente para que un desarrollo sea sostenible, se
debe hacer énfasis en la vida comunitaria, rescatando
y valorando algunos ejemplos de sostenibilidad de los
pueblos indígenas y de comunidades campesinas, sin
copiar necesariamente el modelo, porque cada pueb-
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lo debe generar sus prácticas de sostenibilidad que lo
identiquen como tal.
Construir una cultura de vida comunitaria, a través de
la reciprocidad, solidaridad, intercambio justo, con-
struir valores de hermandad, cultivar y fortalecer el
capital social, en donde el contrato de palabra tenga
más validez que el contrato escrito, como práctica que
aún existe en muchas comunidades rurales de Nicara-
gua, eso es construir un desarrollo sostenible.
Bibliografía
Bansart, A (2009) Ecosocialismo.Caracas.VE. Edit. El per-
ro y la rana. Pp. 178
Elizalde, A (2009) ¿Qué desarrollo puede llamarse sos-
tenible en el siglo XXI? La cuestión de los límites y las
necesidades humanas. Revista de Educación. Pp.53-75.
Godelier, M. (1976). Antropología y Economía. Trad.
Morfá, J. Barcelona. ES. ANAGRAMA. 355p.
Núñez Soto, O (1995) La economía popular, asociativa y
autogestionaria. Managua. NI. CIPRES. Pp.336.
Ramonet. (2006). La izquierda latinoamericana frente
a la Globalización. Managua. NI. Edit. Martin Luter
King-UPOLI. Pp.122.
José Ramón Velásquez Hernández
Antropólogo Social, Máster en Desarrollo Rural, Doctor en Desarrollo Rural Territorial Sustentable. Actualmente es
profesor de la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua (UNAN-Managua), por el departamento de Antro-
pología, en las cátedras vinculadas a la Antropología Rural, Antropología Económica y al Método Científico.